Los socialistas españoles (PSOE), liderados por el presidente Pedro Sánchez, ganaron ayer las elecciones con 28.222281% de los votos, que le otorgan 123 escaños de los 350 que conforman el Parlamento, por lo que deberá pactar para gobernar, cuando se ha escrutado 91.48% de los votos.
El PSOE, que tenía 84diputados en el Congreso en la anterior legislatura, “ha ganado las elecciones”celebradas este domingo, anunció la ministra portavoz, la socialista Isabel Celaá. Los socialistas aseguraron también la mayoría absoluta en en Senado.
“Nosotros no vamos a poner cordones sanitarios. Nosotros vamos a avanzar en la justicia social y en el respeto a la Constitución. Estamos reivindicando el presente y el futuro de nuestro partido: la socialdemocracia tiene futuro”, dijo Sánchez ante el delirio de sus seguidores. “Viva España y viva el socialismo”.
Estos comicios registraron una participación de 75.78%, una de las más altas de la democracia española, en las que el Partido Popular (PP, conservadores) registró el peor resultado de su historia y la ultraderecha entró con Vox en el Congreso de los Diputados.
El PP, que tenía 137 parlamentarios, obtuvo 16.70 % de los votos y 65 diputados, mientras que el liberal Ciudadanos (Cs) se le acerca con 15.78% y 57 legisladores (antes 32).
La coalición izquierdista Unidas Podemos (UP) obtiene 14.31 de los sufragios, con 42 diputados, una caída frente los 71 con que contaba hasta ahora.
El ultraderechista Vox irrumpe con fuerza en el Parlamento con 24 escaños gracias al 10.24% de votos a escala nacional.
El partido catalán ERC, independentista de izquierda, aumenta hasta 3.86 % de los votos y 15 diputados, frente a los 9 que tenía hasta ahora.
Con estos resultados, Sánchez podría lograr una mayoría de gobierno (176 escaños) que reúna a UP, los nacionalistas vascos del PNV (6 diputados) y algunos partidos de izquierda de menor entidad.
Pablo Iglesias, líder de Podemos, se mostró dispuesto a configurar la próxima coalición de gobierno con Sánchez en su intervención tras conocerse los resultados. “Nos hubiera gustado un resultado mejor, pero es suficiente para frenar a la derecha y formar una gobierno de coalición de izquierda”.
De no haber mayoría ni entre los partidos nacionales de izquierda ni entre los de derechas, la llave la tendrían los partidos nacionalistas catalanes y vascos.
Los comicios se desarrollaron “con tranquilidad y sin incidencias”, destacó el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
A paso fuerte
El partido de extrema derecha Vox, la gran sorpresa de estos comicios, estará en el Congreso de los Diputados con 24 asientos, no tanto como esperaba.
No llegaría a la mayoría absoluta con Ciudadanos y con el conservador PP, que se asoma a un resultado catastrófico.
“Después de una campaña muy dura es un alivio, pero ganar no es gobernar”, apuntaba Esther López, una contable de 51 años que se encontraba ayer por la noche en la sede nacional del PSOE en Madrid.
Los independentistas catalanes lograron aumentar su presencia en el Parlamento español en las elecciones generales, cuando sus principales líderes están huidos de la justicia española o sometidos a juicio.
En total, los secesionistas catalanes sumaron 22 escaños de los 350 que conforman el Congreso de los Diputados español, frente a los 17 que habían logrado en los anteriores comicios de 2016.
